Dentro de poco tiempo las generaciones “Y” (nacidos entre 1985 y 1995) y “Z” (nacidos entre 1995 y 2005) serán nuestros clientes, nuestros empleados y muy probablemente…Nuestros Jefes.
Tenemos alguna idea de ¿cómo son?, ¿qué quieren?, ¿cuáles son sus prioridades? Valdría la pena prepararnos al respecto ya que si algo nos ha demostrado la generación “X” y aún la misma “Y” es que no se necesita un empleo formal o tener la mayoría de edad para producir dinero o para crear una empresa.
Estas nuevas generaciones (y las que vengan) poseen una percepción del mundo, las comunicaciones, las fronteras y la tecnología completamente distintas a la nuestra, no se sorprenden por las maravillas de la tecnología, las dan por sentadas. Esto llega a tal punto, que dentro de sus características más interesantes destaca el hecho de que exigen lo mejor de lo mejor en tecnología y de las personas, por ejemplo:
Velocidad.-1 hora o 1 día es una eternidad para ellos, sino puedes hacerlo más rápido o en unos cuantos pasos, no eres lo suficientemente bueno. Pensar en modelos complejos de llamadas telefónicas o múltiples entrevistas, viajes innecesarios o trámites burocráticos ni soñarlo.
Eficiencia.- Conectividad y soluciones globales simplificadas, anteriormente decíamos que si no estabas en Internet no existías, ahora podríamos decir que si no dominas las redes sociales, el lenguaje global, la visión de conjunto, ni siquiera les interesas.
Conocimiento Personalizado y Selectivamente Especializado.- Estudiar una carrera durante 5 años (con materias o maestros “aburridos”), una maestría por 2 años más, para terminar desempleado “¿Cómo para qué?” dirían ellos. Las nuevas profesiones probablemente deberán ser como un bufete de restaurante, en el que cada quién armará las materias que crea convenientes con la asesoría de un mentor con amplia experiencia intergeneracional, pensamiento disruptivo e innovación pedagógica y probablemente sean un 90% virtuales, asincrónicas y sin la necesidad de durar un semestre. La oferta de materias estará más vinculada a la demanda y esta a su vez con la aplicabilidad en el mundo real.
Visión Interprofesional.- No visualizan la necesidad de dividirse por profesiones, ni por empresas, países, idiomas o ni siquiera clases sociales o ideología políticas o religiosas. Saben que mientras más variado sea el equipo, más riqueza de experiencias y mejores resultados se obtendrán. Estarán verdaderamente centrados en las tareas, en las metas. Les importarán más los ¿cómo? que los ¿por qué?
Colectivismo.-No les dará pena preguntar, demostrar que no tienen idea de algo, a diferencia de las generaciones anteriores, tienen perfectamente claro que no lo saben todo y no les importa ya que tienen acceso a la suma de experiencias y conocimientos del resto de la humanidad, así que alguien más lo sabrá. Si existe algo que rebase su capacidad personal, compartirán el reto con el resto del mundo, entre todos lo solucionarán, lo mejorarán y lo harán todo un éxito.
Impacto Social.- A diferencia de las generaciones anteriores, cuyos impactos sociales, económicos, políticos, etc., se deban hasta que ésta entraba en la adultez, la generación “Z” nos demostrará con qué facilidad pueden derrumbar todo un sistema o una institución (aunque sea internacional), solo tendrán que ignorarla por completo y crear una nueva.
Un escenario muy interesante lo veremos con la presentación de Megabox, la venganza del ciberhacker Dot.com (creador de MegaUpload y arrestado por compartir música, videos, etc., infringiendo los derechos de autor). Esta plataforma permitirá a todos los músicos crear, promocionar y vender música directamente a los usuarios, sin necesidad de los intermediarios, lo que reducirá significativamente los costos de las canciones, eliminará la necesidad de piratería, pondrá más dinero en los bolsillos de los creativos y dejará sin un centavo de la operación a todos los intermediarios (que por lo general se llevan la “tajada” más grande) de manera perfectamente legal.
¿Funcionará? Dependerá en gran medida de las nuevas generaciones, pero como acabamos de ver, la burocracia que sirve para controlar y complicar las cosas y hacerlas más costosas no está en la lista de prioridades de los chicos “Z”, de ser así veremos caer al viejo gigante de la industria musical (que curiosamente se ha resistido a las nuevas tecnologías y ha luchado por regularlas, debido a que éstas tienden a transferir el poder de decisión a todos).
En resumen, se avecinan cambios radicales en la forma de pensar, comunicarnos e interactuar, cambios que se darán a velocidades y en tiempos nunca antes vistos, muchas instituciones (y empresas) comenzarán a desaparecer para siempre o a quedar en perpetua obsolescencia y si no nos involucramos a fondo en comprender la esencia de estos cambios, estaremos en serios problemas, parafraseando a Paul Gleason en The Breakfast Club (1985), “me quita el sueño pensar que el día de mañana estos nuevos chicos cuidaran del mundo, cuidarán de nosotros”…
Saludos, Joaquín Salazar
Director
Instituto Mexicano de Psicomorfología.
No hay comentarios:
Publicar un comentario